domingo, 5 de julio de 2009

Vencejos


Esta semana encontramos un vencejo en el suelo.

Estos pájaros son máquinas perfectas para el vuelo. Tanto, que si caen al suelo son incapaces de volver a despegar, pues sus patas están prácticamente atrofiadas.
Los vencejos comen, duermen e incluso hacen el amor volando. Se alimentan prácticamente del aire; del denominado plancton aéreo. Cada año pueden recorrer miles de kilómetros entre África y Europa en busca de las mejores condiciones de vida.
Sin embargo, estos “superhéroes” del mundo animal suelen pasar inadvertidos en nuestro diario caminar por las calles de las ciudades o pueblos. Como nuestra mirada no suele elevarse mucho sobre el horizonte, sólo somos conscientes de la existencia de los vencejos cuando encontramos uno caído ante nosotros.


De alguna manera, eso también ocurre con los emigrantes que comparten el espacio con nosotros.
Muchos de ellos parecieran ser “superhéroes” que se alimentan del aire y que vinieron de muy lejos, buscando mejores condiciones de vida.
Como los vencejos, a veces caen al suelo y necesitarán ayuda; que alguien les eleve y les dé un fuerte impulso para continuar su vida errante.


Algunos, sin sentirnos "superhéroes", ni ser inmigrantes, también nos identificamos con los vencejos. Sentimos la necesidad de estar siempre en movimiento, viajando, cambiando de actividad y de horizontes. No estamos cómodos en ese "estar con los pies en el suelo" con el que la mayoría de nuestros congéneres se sienten seguros.

Pero no sabemos, o no podemos, despegar sólos. Debemos lanzarnos al vacío desde un lugar alto para poder volar. Y a veces, como el vencejo que nos encontramos, necesitamos que alguien nos recoja del suelo y nos albergue cariñosamente entre sus manos mientras nos eleva hasta una altura adecuada.
Yo doy gracias por tener siempre cerca esas manos que me acompañan, paciente y amorosamente, mientras encuentro la manera de remontar de nuevo mi vida.

2 comentarios:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Tuareg dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.